Nuestro mar, nuestra vida

Konstantinos Mentzelopoulos

Coordinador del Proyecto de Conservación Marina de las Cícladas Septentrionales.

Pasé mi infancia en Atenas, pero mi familia siempre pasó las vacaciones de agosto en la costa. Me acuerdo de cuando salíamos de pesca con mi padre y mi hermano, de cómo nadábamos en aguas cristalinas y revivo la sensación de limpieza y recuerdo la fuerza estimulante del mar.

Medio siglo más tarde, estoy cada vez más alarmado por las advertencias sobre los riesgos globales para la salud asociados a la toma de baños en aguas contaminadas, la limitación del consumo de pescado para reducir al mínimo la ingestión de elementos tóxicos, y, lo peor de todo, los impactos sobre los seres que habitan en los mares y la amenaza que se cierne sobre las vidas de aquellos que dependen del mar.

Estos cambios profundamente inquietantes en nuestros océanos me hicieron responder con prontitud cuando Dimitri Zannes, presidente de la Federación de Pescadores del Egeo meridional, me pidió ayuda para desarrollar su idea de crear un área marina protegida en las islas Cícladas del Norte, que es dónde esta organización tiene su sede. Su petición destacaba lo urgente que era emprender una acción inmediata en la región para proteger los ecosistemas marinos amenazados y desarrollar medidas para rehabilitar las poblaciones de peces.

En julio de 2007, el Sr. Zannes me envió un mapa del norte de las islas Cícladas en el que se reflejaba una propuesta de área marina protegida dentro del rosario vagamente circular que forman las islas de Andros, Tinos, Mykonos, Delos, Renia, Syros, Kythnos y Kea. También sugirió la creación de una reserva marina totalmente protegida, que la Federación aceptaría que fuera una zona de exclusión a la pesca, para permitir la recuperación de las especies de peces y demás vida marina. Esta zona se crearía alrededor de Giaros, una isla deshabitada que se encuentra en el centro de esta cadena de islas.

Área del proyecto (clic para mapa ampliado con leyenda)

La zona marina al norte de las islas Cícladas se caracteriza por la presencia de una rica variedad de especies y hábitats naturales, muchas de las cuales están legalmente protegidas en los anexos de las Directivas de Aves y de Hábitats de la UE. Hay como mínimo 8 especies de cetáceos y una población muy relevante de foca monje del Mediterráneo (Monachus monachus). En el área nidifican también diferentes especies amenazadas de aves marinas (por ejemplo, Larus audouinii, Calonectris diomedea), Reptiles (por ejemplo, Caretta caretta) e invertebrados (por ejemplo, Pinna nobilis); praderas de Posidonia; fondos de maerl, marismas, arrecifes, y cuevas marinas sumergidas y semisumergidas que son de importancia crítica para las focas monje.

	Dos crías de foca monje en una cueva en Giaros.

Según MOm (Sociedad Helénica para el Estudio y Protección de la Foca Monje), la población de foca monje en la zona donde se proyecta la reserva marina "representa el 32% de la población griega y aproximadamente el 27% de la población europea de la especie". A lo largo de las 442 millas náuticas de costa de las Cícladas septentrionales hay numerosas cuevas que sirven de refugio a las focas.

Algunas de las cuevas, las mejores, tienen entradas múltiples, playas con arena o guijarros en su interior y en algunos casos son inaccesibles para los humanos. Por consiguiente, es imprescindible localizar, inventariar, cartografiar y evaluar todos estos puntos de descanso, alimentación y cría; valorar las amenazas a la especie, y formular las medidas de protección, una tarea a la que MOm se entrega con entusiasmo.

El Sr. Zannes y sus colegas han comprendido perfectamente la relación existente entre la disminución de las poblaciones de peces y la degradación de las condiciones ambientales marinas debida a las actividades humanas mal gestionadas. Aunque en los últimos años los pescadores habían solicitado ayuda mediante reuniones con representantes de la Comisión Europea, de organizaciones no gubernamentales y funcionarios del gobierno, sólo obtuvieron buenas palabras como resultado. El Sr. Zannes, sin embargo, continuó buscando alianzas específicas con organizaciones y personas que quisieran comprometerse con el cumplimiento de una serie de objetivos compartidos de conservación marina.

La isla de Giaros, ahora deshabitada, fue en el pasado un lugar de exilio y encarcelamiento de disidentes políticos.

El Proyecto de Conservación Marina de las Cícladas septentrionales en Grecia se puso en marcha en abril de 2008 con el objetivo de conseguir la rehabilitación y conservación de la fauna marina, así como el desarrollo de una industria pesquera sostenible. Se han comprometido a ello: MOm , la Hellenic Ornithological Society, el Centro de Investigación y Rehabilitación Cetáceos Arion, el Centro Helénico de Investigación Marina, la Federación de Pescadores del Egeo Meridional, OIKOM Ltd., y el Municipio de Korthi, en la isla de Andros.

Además, otros diez municipios que rodean el área de 5,955 km2 en la que se plantea el proyecto - Andros, Anos Syros, Exomvourgo, Kea, Kythnos, Mykonos, Panormou, Posidonia, Tinos, y Ydroussa - han expresado su apoyo a la iniciativa mediante acuerdos de Pleno municipal aprobadas por unanimidad, sin abstenciones ni de la oposición, participando en la decisión todos los partidos políticos griegos. En vista de los objetivos del proyecto, de sus credenciales y de la variedad de participantes de los sectores público y privado, la Fundación Alexander Onassis S. acordó apoyar financieramente el proyecto, compartiendo nuestra visión a largo plazo en una serie de proyectos destinados a lograr los objetivos de compatibilizar la conservación marina con el desarrollo sostenible de la pesca.

Este apoyo es vital para desarrollar y establecer

1. una nueva ONG ambiental llamada BLUEnature.eu, para impulsar el desarrollo de la investigación científica, la cartografía de la flora y la fauna marinas, conseguir el apoyo de los ciudadanos, mejorar la implantación de los reglamentos de pesca, mediante el uso –en estudio- de los radares del Ministerio de defensa en Andros
2. el Centro de Conservación Marina de las Cícladas Septentrionales de Korthi, Andros
3. áreas legalmente protegidas, incluyendo las ZEPA y los sitios Natura 2000
4. programas de pesca de la UE y medidas para resolver los problemas creados por el  insostenible nivel de actividad y de métodos de pesca actualmente existentes, muchos de los cuales destruyen nuestros recursos naturales marinos.

El 1 de diciembre de 2008, el presidente de la Federación de Pescadores reconoció la utilidad estratégica de utilizar ampliamente las leyes de protección ambiental para emprender el proceso de implantación de un modelo de pesca sostenible en las islas Cícladas del Norte. Esta conclusión se obtuvo tras una evaluación de las políticas de pesca existentes que, debido a su mala concepción e implementación, han hecho posible la continua degradación de la vida marina, incluida la de las especies explotadas comercialmente (un caso flagrante es la reciente decisión tomada por ICAAT en referencia a las cuotas para la captura de atún rojo de 2.009: con el apoyo de la UE y desoyendo todas las recomendaciones en contra emitidas por acreditados científicos, se permite la pesca del atún rojo incluso durante la temporada de desove en los meses de mayo / junio).

Por ello la federación apoya el Proyecto de Conservación Marina de las Cícladas septentrionales, que plantea desarrollar nuevos métodos para reducir las interacciones negativas entre los pescadores y los pinnípedos o los cetáceos, que amenudo desembocan en un conflicto mortal para estos últimos.
El apoyo se hace extensivo a la protección de las especies y de los hábitats naturales de los que depende la reproducción de peces; se aboga por trabajar en la sensibilización de los consumidores para que conozcan la importancia de informarse acerca de los métodos de captura del pescado que compran y de qué caladeros proceden.

En  2006,  en una rueda de prensa con Greenpeace, el Sr. Zannes declaró "Nosotros [los pescadores] estamos al borde del colapso... Ahora sabemos que sólo seguiremos existiendo si mantenemos sanos los ecosistemas... si el mar muere, nosotros también". *

Es con esta filosofía que las organizaciones están empezando a dejar de lado sus pequeñas diferencias de antaño y se centran ahora en abordar con rapidez y de forma global la crisis del medio ambiente marino. No hay tiempo que perder si queremos mejorar las perspectivas de nuestro futuro común. Después de todo, se trata de nuestro mar y, por tanto, de nuestra vida.

*IUCN European Newsletter, Volume 13/2007

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