tmg logo The Monachus Guardian contents
next
previous
Investigación home
Vol. 10 (2): Noviembre 2007



Respuesta de las focas a las tareas de seguimiento
en la costa de Mersin

Ali Cemal Gücü

Levant Nature Conservation Society (LNCS)


En 1995, cuando acabamos con el primer inventario de foca monje en la costa de Mersin, constatamos que la población de focas más importante se encontraba en la zona virgen situada entre Tasucu y Gazipasa. En las zonas vecinas se observaron algunas focas ocasionalmente, pero no parecía haber ninguna que fuera residente. En 2003 empezamos a observar a una foca frecuentando una cueva próxima a una zona urbanizada.

De cara a evitar la entrada de humanos y mejorar el refugio para la foca, LNCS bloqueó el acceso por tierra a la cueva en Julio de 2005 [ver Cerrado el acceso terrestre a una cueva de foca monje, TMG 9(1): Junio de 2006]. Desde entonces se equipó la cueva con una cámara y sensores infrarojos para realizar un seguimiento de la presencia de focas. Al principio se observó únicamente una hembra que aparecía en la cueva de manera esporádica. En 2006 la acompañaba un joven macho inmaduro.

En Julio de 2007 la cueva está siendo usada por tres animales, entre los que la hembra (Ceren) ha aumentado significativamente sus estancias en el refugio. Inicialmente, las focas frecuentaban la cueva sobre todo por la noche (del crepúsculo al alba). Después, esta pauta de uso cambió un poco, detectando presencia intermitente en la playa interior a lo largo del día. Los humanos, antes de que fuera cerrada, solían entrar en la cueva durante el día y es por ello que interpretamos este cambio de horarios en el uso de la cueva como una respuesta positiva de las focas a la medida de protección adoptada.

Los sistemas de grabación usados hasta ahora se componen de un sensor de infrarojos sensible al calor en movimiento, que dispara una cámara digital de 5.1 megapixel con intervalómetro.

La cámara incorpora un flash que ilumina un rango de 7 metros. Este equipo es el necesario para obtener imágenes con suficiente nitidez para fotoidentificar los animales.

Según el tiempo de uso que se pretenda dar al equipo, que puede llegar a ser de 2 o 3 meses, el intervalo entre dos disparos consecutivos de la cámara se ajusta entre 10 y 30 minutos. Esto significa que con el intervalo prefijado se dispara el flash si hay una foca en el rango de detección de los sensores. Las imágenes obtenidas muestran que las focas perciben el flash; en diferentes ocasiones los animales tienen la cabeza girada hacia la cámara. Ello hizo que nos preocupáramos ante la posibilidad de que el flash creara molestias reales a las focas. (Fig. 1).


monk seal flash picture
monk seal infrared picture

Fig. 1. Una foca en un aparente movimiento de reacción ante el flash de la cámara.

Fig. 2. Una foca parece reaccionar ante una fuente de infrarojos.

Desde la LNCS comenzamos a evaluar los efectos del uso del flash sobre las focas. Ahora tenemos instaladas dos cámaras, una con flash y la otra con luz infraroja, funcionando alternativamente una semana cada una. El sistema funciona así para descartar el posible efecto del cambio estacional. Hasta ahora el sistema de cámaras ha registrado 192 eventos. Los resultados preliminares indican que el tiempo medio de estancia en la playa de las focas expuestas a disparos con flash es algo mayor que las fotografiadas con luz infraroja. La evaluación estadística de los resultados de los dos sistemas no arrojó diferencias significativas desde el punto de vista estadístico. (F test: p>0.05).

El número de veces que una foca fue expuesta al flash varió entre 1 y 27. Este número es algo superior al de disparos con infrarojo. La media de disparos de los dos sistemas es casi idéntica. (F test: p>0.05).


Sistema/estadística

Con flash

Infrarojo

Número total de eventos (fotos)

118

74

Tiempo medio de permanencia (D.S.)

429 min (551)

247 min (231)

Máximo número de disparos

27

23

Media de disparos (D.S.)

6.6 (7.9)

5.5 (7.1)

Tamaño de la muestra

18

14

Tabla: Resultados estadísticos.


Todas las prestaciones adicionales de la cámara (ojos rojos, pre-flash, sonidos audibles etc.) se mantienen desactivadas para minimizar en lo posible cualquier molestia.

Algunas imágenes obtenidas con los infrarojos parecen sugerir que las focas reaccionan al disparo de las bombillas de infrarojos que se ven de color rojo, brevemente, cuando se activan. (Fig. 2). Pensamos que la luz es lo suficientemente breve e inocua como para que los animales recuperen rápidamente su comportamiento de descanso.


monk seal infrared picture
monk seal flash picture

Fig. 3. Una foca capturada en modo infrarojo, en el que la definición de la imagen es menor.

Fig. 4. Una foca capturada por la cámara con flash. La coloración y las marcas son mucho más visibles que en modo infrarojo.

La recolección de datos de este tipo es inherentemente difícil, por la escasez de ejemplares de esta especie. Los datos disponibles, aunque pocos, muestran que los flashes disparados a intervalos de 10 minutos no molestan a las focas en la cueva. El uso de imágenes en color para la fotoidentificación tiene muchas ventajas comparado con el uso de imágenes infrarojas, ya que en éstas últimas los detalles como heridas y decoloraciones no se pueden apreciar. (Figs. 3 & 4).


monk seal infrared picture
monk seal infrared picture

Fig. 5 y 6. El 30 deOctubre, poco antes de cerrarse este artículo, el sistema de grabación con infrarojos grabó a una madre con su cachorro en la cueva.


El autor expresa su agradecimiento a Giulia Mo del ICRAM por la revisión de este artículo y por sus comentarios.



previous   contents   home   next
Copyright © 2007 Ali Cemal Gücü, The Monachus Guardian. Todos los derechos reservados.